24 Y 25 de Julio... embarcado e infantería¡¡
Buen fin de semana el pasado, la verdad. El Sabado por fin quedé con mi hermano Angel. Tenía muchas ganas de salir con el y probar su flamante barco,, vaya pepinaco¡¡¡¡
Quedamos tan pronto como el toque de queda nos permitió y salimos rumbo al primer punto,, no tardemos en llegar,,, jeje,, no veas como zumba el barquito.
La sorpresa, que no por esperada fue menos sorpresa, fue el mar... un levante incómodo hizo que la jornada quedara condicionada. La claridad de las aguas se fue perdiendo poco a poco. Primeras bajadas a poca agua, y sorpresa.. primeros lances con mis queridas doradas. El estado el mar y la turbiedad del fondo hacían un contraste espectacular,, blanca abajo, y azul arriba... Llegando a la zona para empezar con las esperas, de la nube blanca del fondo salieron varias doradas que se quedaron paseando en el azul.. tiempo justo para hacer una caída - acecho, pero sin suerte en el disparo. Tras ésto, unas esperas en la piedra donde pude ver una bonita lubina que no hizo el mas mínimo gesto para acercarse,, y volviendo a la barca, misma situación. Encuentro con las preciadas doradas,, en esta ocasión, caida sigilosa,,, y en el último momento da un coletazo que hace que el disparo salga bajo y se suelte.. mala suerte.
Tras esto, probé varios sitios mas, a mas profundidad y con agua mas limpia, pero sin suerte... no queda otra que recoger, volver a puerto disfrutando de la navegabilidad del barquito y pegarnos un buen almuerzo para recuperar fuerzas....
Mejor compañía no se puede tener... gracias tio¡¡¡-
La salida del Domingo fue completamente diferente,, sabía que el levante amainaba a primera hora, y decidí probar un viejo huerto. En esta ocasión, las primeras diez bajadas fueron para hacer esperas con el 100, pero sin suerte. En seguida cogí el 75 y me dediqué a lo que había ido a mirar.. agujeros.
La intención era revisar un cantíl al que hacía años no iba, y recuerdo algún agujero de mero que me dio satisfacciones en el pasado.
Empecé viendo mucho sargo y algún mero pequeño.. al poco rato, en un acecho, pude ver un mero,, subí y preparé el acecho.. reptando por el fondo llegué frente a la cueva y allí estaba pegando el coletazo... disparo instintivo pero fallé.. no lo vi mas..
Tras ésto y viendo que podía haber alguno mas por la zona, me dediqué a escudriñar aun mas los agujeros, viendo meros pequeños simplemente. En una de las bajadas, identifiqué una losa que hacía una esquina con otra mayor, y un pequeño arenero en el fondo.. es el agujero que buscaba.. en ocasiones se ha tapado de arena,, así que toca ver como está.
Bajo a contraluz, entro dentro, encaro fusil y enciendo la linterna,, bingo,, un bonito mero me mira.. pero es una décima de minuto y se esconde.. no consigo verlo.
Subo, relajo , espero un poco y vuelvo a bajar.. con mucho sigilo, me aproximo, y hago el mismo recorrido y la misma acción... enciendo la linterna y no veo el mero,, solo un cabezón de un buen congrio.. reculo y salgo.
Subo y analizo... finalmente, decido fondear y revisar agujeros y grietas por el entorno, dejando el agujero tranquilo durante unos 10 minutos.
Pasado ese tiempo,, recupero aliento, memorizo la bajada y empiezo el descenso.. caigo unos 6 metros fuera del agujero, repto por el cantil lo mas pegado al fondo posible, y me adentro en el agujero haciendo muy poco ruido,,me posiciono donde recuerdo estará el agujero del fondo, encaro el fusil y enciendo la linterna.. el mero está justo a medio recorrido, no doy tregua y disparo. El mero se queda inmóvil, ,tiro de la varilla y viene.. le he disparado bien y la varilla le sale un poco por la cabeza.
Tras unos años, da alegría ver que viejos boquetes siguen dando sus frutos mientras se respeten.
Después del lance, me encuentro con algún otro mero, uno de ellos de buen porte, pero en una tana imposible... ese quedará para intentarlo otro día.
3 horas ya desde que entré y mucha distancia recorrida, es hora de tomar el camio de vuelta.
Durante el camino de vuelta, una imagen semejante a la del día anterior me volvió a ocurrir.. un grupo de doradas comía en el fondo,, hago una caída y se marchan.. subo,, pienso como poder hacer que vuelvan, pues estoy en un arenal,, y no hace falta pensar mucho mas,, una de ellas vuelve y se pone a comer justo debajo,,, golpe de riñón,, encaro el fusil y ,, joder llevo el 75.... aún así consigo acercarme lo suficiente para dispararla y traspasarla, aunque segundos después,, en una arrancada hacia arriba consiguió zafarse y marcharse.. una pena.
Finalmente, el día fue de lo mas entretenido,, un gran día disfrutando de mi entorno favorito.
Gracias por leerme¡¡¡¡
