domingo, 6 de marzo de 2022

El Viaje plateado de Febrero

 El Viaje plateado de Febrero


El invierno está siendo duro en cuanto a pescado.. no así el tiempo que ha permitido salir bastante. Hablando con compañeros , todos opinan lo mismo.. un año atípico allá donde los haya. No sabemos si es por que no ha hecho mucho frío, el mar tranquilo que hemos tenido,, no se, pero sacar un pescado ha sido duro.

He decidido este fin de semana salir con poca esperanza, pero como hacía un par de findes que no salía, decidí cambiar de escenario y bajarme al sur.. es un trayecto largo, pero bueno, de vez en cuando apetece desconectar y echar la mañana en otro sitio.

La mañana está un poco fría, lluviosa y con viento.. madrugo , cargo el coche y empiezo el camino. En mi mente, como en la de todos nosotros, las imágenes de posibles encuentros con ejemplares espectaculares, grandes lances, etc hacen que el camino sea mas a ameno, aunque la cruda vuelta a la realidad no haga que deje de intentarlo una tras otra vez.

Me cambio y entro al agua, la visibilidad va a capas, pero es buena.. una hora y media haciendo esperas sin ver nada disparable. Una esquiva dorada sigue su camino completamente fuera de tiro, así que prosigo. Llego a mi zona preferida, dejo el fondeo de la boya, y empiezo el modo sigiloso ... una primera espera hace que mis sentidos se pongan en alerta... un banco de lisas vienen de frente, me agazapo... encaro el fusil, pero las lisas pasan... no hay nada,,, durante dos segundos, hay viene una bonita lubina,, viene alta, rapida, y antes de que pueda acabar de encararla, gira  con un sonoro coletazo y se marcha, las lisas corren por todos lados, me faltan ojos para ver por donde puede volver,, sigo abajo, pasan los segundos, la adrenalina se dispara,, estoy al final de la espera, las lisas van y vienen,, miro hacia arriba y de atrás a delante, veo una preciosa lubina,, viene alta y rapida, encaro mi fusil.. disparo largo y la lubina cae fulminada.

El hecho de sacar una bonita pieza, me hace seguir en la zona.. en otra espera, a poca agua encaro el fusil mientras me aposento,, pasan 5 segundos giro la cabeza y otra preciosa lubina viene directa, se planta a escaso un metro de mi, pero el fusil no está encarado,, intento moverme poco, empiezo a encarar, pero no aguanta y se marcha.. una lástima.

Tras esto, y tres horas y media después de haber entrado, salgo para afuera, me cambio y toca descanso.

No estoy pasando por el mejor momento de mi vida,, pero mi rato de pesca hace que al menos durante el tiempo que estoy abajo, aunque no al 100%, mi mente se mantenga distraída de lo que sucede en superficie.. Es increíble como cambia el estado físico y mental tras disfrutar del mayor placer que un pescasub puede tener,, ni siquiera la satisfacción de una buena pieza,, lo mejor es poder disfrutar de nuestro entorno, la soledad, tranquilidad y relajación que nos da nuestro mar.


Os dejo foto de la pieza, y seguiremos intentándolo.